lunes, 28 de diciembre de 2009

Presupuestos 2010: Astérix y Obélix en Navalmoral

Año 2010. Todos los Ayuntamientos de España están reduciendo sus gastos y buscando nuevos ingresos con que mejorar sus maltrechas arcas. ¿Todos? No. En una pequeña ciudad al norte de Extremadura, un grupo de irreductibles moralos siguen empeñados en aguantar gastando y gastando.

Este podría ser un resumen en tono de humor del debate de presupuestos de esta mañana en el Ayuntamiento de Navalmoral. Un presupuesto que otro año más (y ya van demasiados) se lleva el 90% en gastos de personal y gastos corrientes.

Es evidente que los trabajadores municipales tienen que cobrar sus sueldos y hay que pagar su Seguridad Social. Y también es evidente que el Ayuntamiento tiene que gastar en electricidad, teléfono, limpieza viaria, etc. Pero lo que todos esperábamos es ver siquiera un intento de contener esos gastos que suponen una auténtica sangría en los fondos de los que dispone el consistorio moralo.

La razón es muy simple: los recursos son limitados y lo que se puede destinar a inversiones es lo que nos sobra una vez se ha hecho frente a esos gastos. Si los gastos fueran menores, habría más para invertir. Como no nos planteamos reducir esos gastos, nos encontramos con que sólo se puede destinar a inversiones un mísero 5% del total del presupuesto. Y precisamente son inversiones lo que necesitamos.

Claro que esta situación tiene sus consecuencias: el Teniente de Alcalde ya nos ha anunciado que a primeros de año habrá que pedir un crédito por falta de liquidez de la tesorería municipal.

Pero ese es otro cuento, y el PP ya ha encontrado una bruja mala a la que echar la culpa: la Junta de Extremadura. Como siempre.


¡Feliz año nuevo a todos!