Los concejales socialistas del Ayuntamiento de Navalmoral estamos acostumbrados a que el Equipo de Gobierno utilice a los funcionarios como parapeto para tapar sus errores, como excusa para ocultar sus intenciones, o como cabeza de turco a la hora de asumir responsabilidades.
Lo que ocurrió ayer en el Pleno con respecto a la obra de la Residencia es buena muestra de ello.
En primer lugar se debatió una modificación del proyecto original redactado por un arquitecto madrileño. El proyecto es una auténtica chapuza, y cuando se habla de modificación en realidad se está ocultando que ha habido que rehacer el proyecto en su práctica totalidad.
El Teniente de Alcalde nos afeó el que calificáramos el proyecto de chapuza sin tener los conocimientos adecuados, ya que ninguno de los concejales socialistas hemos estudiado arquitectura.
Cuando leímos un informe del Arquitecto Municipal que afirma que estaba mal hecho el cálculo de estructuras, el replanteo de obra, el levantamiento topográfico e incluso las mediciones, Pepe Pascual restó importancia al informe hablando de “pequeñas deficiencias”, es decir, que se pasan el informe del técnico por salva sea la parte.
En el siguiente punto del orden del día, volvieron a salir los técnicos municipales. Se trataba de aprobar el pliego de condiciones para la segunda parte de la obra de la Residencia. En el baremo se introducen conceptos nuevos, que nunca antes se habían tenido en cuenta para ninguna obra del Ayuntamiento y que ponen muy difícil a algunas empresas poder ni siquiera presentarse a la licitación.
Hemos pedido que se retiren esos conceptos nuevos y que se valore mucho más la creación de empleo en la obra. Ése es el objetivo del Plan E: la creación de empleo. El PP rechazó nuestra propuesta y mantuvo el pliego sin ningún cambio porque lo habían redactado los técnicos. No se lo creen ni ellos.
Los dos informes estaban firmados por el mismo técnico, pero el primero no se tiene en cuenta y del segundo no se puede mover ni una coma. Y todo ello en menos de quince minutos.
El Ayuntamiento de Navalmoral puede presumir de la profesionalidad y la seriedad de sus técnicos. Por eso algunos de ellos están hartos de que el PP los utilice a su antojo y siempre en su beneficio. No me extraña.
Lo que ocurrió ayer en el Pleno con respecto a la obra de la Residencia es buena muestra de ello.
En primer lugar se debatió una modificación del proyecto original redactado por un arquitecto madrileño. El proyecto es una auténtica chapuza, y cuando se habla de modificación en realidad se está ocultando que ha habido que rehacer el proyecto en su práctica totalidad.
El Teniente de Alcalde nos afeó el que calificáramos el proyecto de chapuza sin tener los conocimientos adecuados, ya que ninguno de los concejales socialistas hemos estudiado arquitectura.
Cuando leímos un informe del Arquitecto Municipal que afirma que estaba mal hecho el cálculo de estructuras, el replanteo de obra, el levantamiento topográfico e incluso las mediciones, Pepe Pascual restó importancia al informe hablando de “pequeñas deficiencias”, es decir, que se pasan el informe del técnico por salva sea la parte.
En el siguiente punto del orden del día, volvieron a salir los técnicos municipales. Se trataba de aprobar el pliego de condiciones para la segunda parte de la obra de la Residencia. En el baremo se introducen conceptos nuevos, que nunca antes se habían tenido en cuenta para ninguna obra del Ayuntamiento y que ponen muy difícil a algunas empresas poder ni siquiera presentarse a la licitación.
Hemos pedido que se retiren esos conceptos nuevos y que se valore mucho más la creación de empleo en la obra. Ése es el objetivo del Plan E: la creación de empleo. El PP rechazó nuestra propuesta y mantuvo el pliego sin ningún cambio porque lo habían redactado los técnicos. No se lo creen ni ellos.
Los dos informes estaban firmados por el mismo técnico, pero el primero no se tiene en cuenta y del segundo no se puede mover ni una coma. Y todo ello en menos de quince minutos.
El Ayuntamiento de Navalmoral puede presumir de la profesionalidad y la seriedad de sus técnicos. Por eso algunos de ellos están hartos de que el PP los utilice a su antojo y siempre en su beneficio. No me extraña.